Pico, zorro, zahina

Los jugadores se repartían en dos grupos y sorteaban para ver qué grupo tenía que saltar y cuál debía "hacer de burro". Un chico de los del grupo que habría de soportar el peso se sentaba en el suelo, intentando quedar un poco alto, por lo que buscaba un tajo, un estribo, un madero, una repisa de una ventana, etc.

Las nuestras las formábamos la mayor parte de las veces, en el interior del "molino de los Sánchez" al calor de la molienda y la repisa de una ventana. Una de mis marcas procede de saltar el primero e ir a caer de golpe contra la repisa de la ventana.

A continuación, un chico de su mismo grupo ponía la cabeza entre las piernas del que se había sentado y se abría de piernas "espatarraba" para que el siguiente pudiera introducir la cabeza y abrir también las piernas para que hicieran lo mismo cada uno de los chicos que integraban ese grupo.

Los chicos del grupo contrario iban brincando de uno en uno sobre los que estaban agachados, procurando hacerlo por orden de destreza y maña, con el fin de que los que más saltasen lo hicieran los primeros y consiguieran colocarse en la cabecera para dejar sitio a los que habrían de saltar detrás. Ocurría con frecuencia que los primeros no saltaban lo suficiente, y, cuando iban a brincar los últimos, se las veían y se las deseaban, de forma que a veces hasta tenían que hacerlo los unos sobre los otros. En estos casos, solían empezar a caerse antes de que hubieran conseguido saltar todos entonces, perdían y debían ocupar "burro" para que saltase sobre ellos el grupo contrario.

Si lograban mantenerse todos sobre el "burro", uno de ellos, preguntaba: "¿qué es: pico, zorro o zahina ?". Uno de los chicos que aguantaba la carga, es decir, de los de abajo, debía responder e intentar pronosticar la seña que con las manos hacía el de arriba. Si esto ocurría, habían ganado, y los grupos cambiaban sus posiciones. El chico que estaba sentado vigilaba que no se hicieran trampas (las señas que se hacían eran las siguientes: Pico (cruz): se hacía una cruz con los dedos índices de ambas manos; Zorro (bollo): se colocaban los dos puños cerrados y uno frente a otro; Zahina (campanario): los dos puños cerrados se colocaban uno sobre otro.

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